Cuando el calor aprieta, el ocio llama a tu puerta con insistencia, la montaña llama al retiro, el aire marino te envuelve con sus efluvios, el marido en casa solicitando atención (y sonsacando), la pequeña pero no menos exigente faena laboral y mi vaga naturaleza esencial se confabulan, no hay dios que me permita ponerme a escribir. Siento el abandono, y aún nos queda una semana de vacaciones estivales. La vida es tan dura….
Quiero dar las gracias a todos por su participación, sus comentarios y las preguntas que han ido dejando. Prometo elaborar un próximo post donde responderé a todos los pendientes y para que de este modo no se pierdan tampoco por ahi por el resto de los escritos. En septiembre vendré con todo los hierros a seguir dando la tabarra, tengo planes nuevos que quiero compartir con todos ustedes ;-).
Mientras voy a seguir veraneando…. 😀
2 comentarios
Si te sientes cansada, descansa.
Tan sencillo como eso y tan difícil de comprender, a veces el mundo se olvida de ti pero tú no de él.
De modo que si no quieres que todos sufran por tu JUSTÍSIMO deseo de descansar, deja las cosas listas(es decir de una fomra en que puedas descansar y no te sientas la por los otros).
Llega un período en que las águilas se internan en la montaña, se quitan su pico y sus uñas, para que vuelvan a crecer.
Además, ya va siendo hora que la gente se de cuenta, que es tu vida, no una vida que sirve a todos.
🙂 abrazos
Vicky, qué sensible eres, como buena poeta :-). De eso se trata el silencio, que empezó en verano y aún no acaba: de mudar pico, plumas, uñas.. aunque ya tengo nuevos brotecitos, esa ha sido la razón de mi ausencia, y tu lo has visto nada más llegar… es una ironía, pero a veces ni los más cercanos lo notan.
He pasado una época de profunda evaluación de algunos aspectos de mi vida, indecisa muchas veces acerca del rumbo que tomar, y me distraje.. a veces, de lo esencial. También tengo intereses nuevos, nuevos desafíos e inquietudes y les voy dando mis energías, en algunos casos no me sirven las experiencias pasadas y todo es tan nuevo, que incluso la misma gente de siempre no me puede ayudar, y claro, me canso en la batalla de la semisoledad..
Pero bueno, tus palabras me han animado a escribir, aprovecharé la inercia de las mismas para seguir ;-). Gracias y bienvenida.